12/11/2024
Por Weissman Susan , ,
Alex Buchman (1911-2003)
Alex Buchman, el último sobreviviente de los guardaespaldas norteamericanos de Trotsky en Coyoacán falleció el 7 de enero, a los 91 años. Alex no sólo estaba ya mal de salud, sino que resbaló y se cayó durante una tormenta y fracturó su cadera. Pudo pasar la operación, pero su corazón se rindió al día siguiente. Alex era uno de mis más queridos amigos. Al momento de su muerte estaba trabajando en exhibiciones fotográficas de sus muchos retratos de Trotsky.
Alex era un ingeniero aeronáutico retirado y fotógrafo amateur. Fue a México en 1939 a mostrar al “Viejo” sus fotos y filmes tomadas durante sus seis años en China, donde militó en la Oposición de Izquierda trotskista junto a sus amigos Frank Glass y Harold Isaacs. Tomó cientos de retratos y un film de Trotsky durante su estadía de cinco meses en 1939-1940. Mientras estaba en Coyoacán se alistó para mejorar el sistema de seguridad y se desempeñó como guardián. Fue reemplazado en abril de 1940 por Sheldon Harte. Un mes más tarde, hubo un intento fracasado de asesinar a Trotsky, dirigido por David Alfaro Siqueiros, célebre muralista y estalinista fanático. Durante el ataque Harte fue secuestrado y luego asesinado. Cuando se abrieron los archivos soviéticos en 1992, se reveló que Sheldon Harte había sido un agente estalinista, ejecutado antes que pudiera divulgar lo que había sucedido. Alex nunca dudó que Harte había sido el entregador, pero no publicó sus sospechas hasta que apareció la confirmación oficial en la ex URSS.
Sus filmaciones y retratos están entre las últimas tomadas antes del asesinato de Trotsky, y son los registros más extensos de los años finales del Viejo.
Alex volvió a los Estados Unidos y a fines de los años cuarenta trató de organizar un sindicato de ingenieros en Rockwell. Era a comienzos de la Guerra Fría, y el FBI empezó a investigarlo. Fue suspendido en su trabajo, acusado de comunista. Tras una batalla judicial, logró ser reincorporado. Los archivos del FBI contienen la trascripción de las audiencias. Fue interrogado sobre su trabajo en China, su “comprensión de la doctrina del materialismo histórico”, qué libros leía, qué opinaba de obras como El Manifiesto Comunista, y Problemas del Leninismo, si Trotsky representaba una continuación del marxismo, y “¿cómo debería llevarse a cabo la transformación del capitalismo al socialismo?”. Imaginémonos cómo harían los empleados del FBI de hoy para poder siquiera articular estas preguntas...
Alex fue “re-descubierto" poco antes de cumplir los 90 años. Sus fotos sobre China (1933-1939) fueron exhibidas en Los Angeles y fue tema de un artículo en la revista GQ en diciembre de 2001. Al igual que los mejores de su generación, Alex era lúcido, entregado y brillante. Su honestidad e integridad lo llevaron tempranamente a tomar posición en la lucha de clases. El arma que eligió para luchar contra un sistema inhumano de explotación resultó ser una cámara, y su legado, los registros fotográficos que dejó para las futuras generaciones. Es el ojo del artista detrás de la lente, su sensibilidad y generosidad lo que será tan penosamente extrañado.
(Traducción: Francisco T. Sobrino)
Extraído del artículo enviado por su autora: Alex Buchman: a Remembrance by Suzi Weissman.