04/12/2024
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Ediciones Herramienta
Novedad editorial
Distribuidora Herramienta
Prólogo: Algredo Grande y Andrea Arrigoni
Edición: Ediciones Herramienta y Contrahegemonía, 176 páginas, 2019
ISBN: 978-987-1505-63-0
Precio: $ 420-
Peso: 270 gr.
Medidas: Alto 22,5 cm / Ancho 15,5 cm / Lomo 1,1 cm
A modo de introducción
Abordar la llamada reforma educativa en clave crítica implica desnudar las operaciones que desde hace casi 30 años fueron puestas en marcha para la desposesión del sistema de educación pública.
Desde los organismos internacionales, las fundaciones y ONGs corporativas, se despliega el ademán de conversión de la educación en mercado; durante los ’90 del siglo pasado se impuso el concepto de “servicios educativos” y posteriormente el de “bien social”. Curiosamente nunca fue dejada de considerarse un servicio puesto que en el mercado educativo existen “bienes” y “servicios”, es decir, productos transables.
Pero esta reforma tiene aristas complejas desde la perspectiva política e ideológica, porque lo que impone son fuertes transformaciones de carácter doctrinario sobre las subjetividades sociales, emparentadas con la preceptiva que impone el mercado para la creación de sus “recursos humanos” del siglo XXI.
Toda la reforma se monta en el juego desposesión / acumulación: la desposesión de derechos, de saberes, de pensamiento y la acumulación de dinero y concentración del poder de las minorías empresariales, como irás viendo lector/a en el recorrido por este trabajo.
La reforma implica un proceso de mayor alienación social donde aparecen las nuevas formas del “Requerimiento de Obediencia” que la colonialidad del poder nunca abandonó.
Seguramente, leerás relaciones que te parecerán de una obscenidad manifiesta, en cuanto al poder empresarial, sus estrategias y sus objetivos en educación. Poder empresarial que también es el poder político.
Tal vez los reformadores nos han hecho creer que los espejitos de colores llegaban para darle “calidad” a la educación, pero no, lo que hicieron fue ponerla en crisis para su posterior apropiación.
Tal vez, este breve trabajo, que por economía textual no puede llegar a todo el entramado de carácter mundial, explora y desteje la madeja de sujeción colonial que la reforma educativa veladamente impone.
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PROLOGO
La educación en la era corporativa
Alfredo Grande
Siempre he señalado que un título, cuando se apoya en el nivel fundante, es una condensación de todo el texto. Como la leche condensada: solo hay que calentarla, pensarla, desarrollarla, para que salga el más sabroso dulce. En este caso, no podemos decir que el sabor que quede de la atenta lectura sea dulce. Por el contrario: amargor, tristeza, rabia, impotencia… El caldo de la desesperación. Sin embargo, al menos para mí la lectura del libro deparó dulzura. La de ser amigo de un combatiente por la educación no corporativa y por la disolución de todas las formas de la cultura represora. Porque de eso se trata: Darío ha cartografiado un formidable analizador construido político, histórico, teórico y militante. Lo que dice lo hace. Lo que hace, lo escribe. Intelectual orgánico consecuente, pero nunca obsecuente. Y dispuesto a venderse siempre, pero solamente al peor postor. Esos y esas que necesitan leerlo, aunque ni siquiera lo conozcan. He tenido el privilegio y el orgullo de conocerlo. Y de compartir espacios de militancia. Y de tránsitos y devenir personales. Lo que Darío define “era corporativa” yo hace décadas lo he denominado “cultura represora”. Su cuádruple registro: mandato, amenaza, culpa y castigo tienen en el desarrollo del libro su plena expresión. Con un fundamento de citas que no pueden ser soslayadas en su lectura minuciosa, Darío verifica que no hay mejor astilla que las del mismo palo. Al palo (big sitck) de las organizaciones mafiosas, incluidas las que dependen directamente de los gobiernos imperiales y coloniales, cuanto de las metástasis que algunos llaman ONGs. Además de nombrarlas con sus apodos completos, con citas que harían estremecer a cualquier mujer y hombre honradx y de buenas costumbres, coloca en el centro del debate algo estremecedor. Las industrias más rentables en el mundo de la inmundicia capitalismo son las armas, los medicamentos, la pornografía y… la educación. Los billonarios del mundo, con convenios-marco firmados con los gobiernos, en los cuales la delincuencia generalizada genera políticas públicas para beneficiar al oligo poder privado, han logrado una multiplicidad de pactos perversos, disfrazados de “educación humanitaria”. Con un lucro acumulado de billones de dólares, y un lenguaje encubridor y paradojal que haría las delicias de un George Orwell de la actualidad. Lo que él denominó “doble pensar” y ¨neo habla”, encuentran en este libro su más contundente confirmación. El denominado “Requerimiento de Obediencia”, fundante de la subjetividad sometida, adquiere dimensión planetaria y global. Pero este requerimiento debe ser invisibilizado. Y para no olvidar que soy psicoanalista, es el mismo pasaje de la amenaza de castración, que es de muerte, a la construcción del superyó. Un superyó planetario nos aplasta, y ha sabido construir sus propios Ideales del superyó. Por ejemplo: el consumismo, que es consumir consumo. En el plano de la educación post universitaria, el alucinatorio de los papers. Cuando con acierto Darío mencionaba el formateo de la subjetividad de los neo educadores, cabe complementarlo con que ese formateo es de la instancia superyoica. La que en forma inconsciente, pero inapelable, decide qué es lo bueno y qué es lo malo, es la instancia superyoica. Y por lo tanto la producción gubernamental de culpa, haciendo palanca en la necesidad de niñas y niños de estudiar, estigmatiza a maestras y maestros. Que de víctimas del saqueo, pasan a ser victimarios de la ignorancia de los alumnos. Este es un libro de lectura implicada. Y además, es libro de consulta para todos los militantes que pretenden cambiar al mundo, pero que mantienen el profundo deseo de conocerlo. Entre la “Novela Educativa” y este texto, hay varias vueltas de tuerca y apretadas de tornillos. Explica, por ejemplo, por qué de la carpa blanca, que fuera resistencia al padre/madre de la gangrena neoliberal, hoy no queda ni la foto. Pero nuevas fotos de nuevas marchas han llegado. ¿Acaso los pañuelos verdes no marchan para que embarazo y deseo sean una cosa y la misma cosa? Alguna vez escribí que la cultura represora ha logrado que el sujeto viva su esclavitud con la sensación de la más plena libertad. Este libro nos pone delante de los ojos y al costado de los oídos, para quien quiera leer que lea, para quien quiera oír que oiga, el estatuto de nuestra absoluta esclavitud. No para lamentarse, sino para prepararse. Para lo que será, más temprano que tarde, el requerimiento colectivo de la más absoluta desobediencia. Entonces, aunque todos los caminos conduzcan a Roma, podremos destruir Roma.
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PROLOGO
¿Aceptaremos ser un código de barras?
Andrea Arrigoni
No estoy muy segura si invitarlxs a leer este libro o si mejor, primero, advertirles que no podrán recorrerlo pasivamente. Puesto que se trata de un texto en modo “despertador”, que por momentos nos puede indignar o inquietar, pero que también nos interpela y convoca. Estimado y estimada lectora están avisadxs.
Ahora sí, quisiera contarles que a lo largo de las últimas décadas el profesor e investigador –pero fundamentalmente incansable luchador–Dario Balvidares, nos ha ayudado a comprender las sucesivas y variadas formas con las que, cual camaleón, las mal llamadas reformas educativas y laborales intentan avanzar sobre la región y continentalmente.
De este modo, encontraremos en este nuevo trabajo un primer plano que describe minuciosamente la compleja red de organismos, mega empresas, fundaciones y ONGs a través de las cuales el poder corporativo económico, con la complicidad de los gobiernos locales, transforma la educación en un negocio multimillonario. En palabras del autor, “no es la educación del futuro, sino el robo del siglo”.
Sin perder de vista la pizarra completa, la que desnuda la articulación de las piezas de un enorme rompecabezas, presentado de manera fragmentaria y con numerosas operaciones semánticas, por los gobiernos y los pseudo especialistas en educación –sin ninguna ingenuidad–; desde el primer capítulo se nos plantea otro plano que hace a la génesis de lo que llamará el “operativo desposesión”. Así, este texto recorrerá desde la conquista del territorio americano y su pedagogía del sometimiento con “el Requerimiento de Obediencia”, pasando por la “pedagogía fundante” y normalizadora, hasta llegar al pasaje desde una colonialidad industrial a la actual financiera con su “pedagogía de los resultados” o “ pedagogía instrumental”, que ya no habla de la calidad de la educación sino en términos de la “calidad de la producción” y la estandarización. Sostiene el investigador: “Este proceso de ‘financiarización’ de la economía obligó a toda una reconfiguración a nivel global que viene produciéndose desde los años 70 del siglo pasado y ha puesto en tensión hasta dominar el sistema productivo (...) es netamente capitalista es decir que asistimos al pasaje de la colonialidad industrial a la colonialidad financiera”
Pero tanto el plano de lo descriptivo como el recorrido histórico de la neocolonización se funden en un necesario análisis político-económico que vincula esta nueva expoliación con la era del extractivismo y la apropiación de territorios, el nuevo avasallamiento a las comunidades y pueblos originarios, la gentrificación o movimientos poblacionales así como la transformación alimentaria y modos de producción agraria con sus obvias consecuencias para la salud.
Por último nos plantea la dialéctica que encierra la creación de una nueva subjetividad –necesaria para aceptar el “despojo educativo por acumulación”– que a su vez retroalimenta la concepción de una formación destinada a producir sujetos sin historia, ni geografía, sin derechos laborales, ni colectivos, individuos funcionales y descartables a modo de las necesidades de la economía del mercado.
Es por eso que este trabajo trasciende las problemáticas específicamente educacionales, y nos para frente al meollo de nuestra crisis civilizatoria en el marco de las múltiples voracidades del capitalismo actual. ¿Es posible pensar las necesarias pedagogías sociales y críticas que impidan transformar las próximas generaciones en códigos de barras? ¿Cuáles serían los cambios de contexto, sociales culturales y económicos, necesarios para que esas pedagogías puedan avanzar? Son algunos de los interrogantes que este trabajo nos despierta e invita a pensar colectivamente para tomar la educación (y la vida) en nuestras manos.
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Darío Balvidares
Es Profesor y Licenciado en Letras (FFyL-UBA). Fue docente durante 30 años y Rector de la Escuela de Comercio 3, Hipólito Vieytes (CABA).
Como investigador es autor del ensayo "La novela educativa o el relato de la alienación" (2005) con prólogo de Osvaldo Bayer y de otros tantos trabajos y artículos publicados en Contrahegemonía Web, Rebelion.org y en Otras Voces en Educación. Fue articulista de la revista "Novedades Educativas". Participó del Foro de Educadores de Izquierda Anticapitalista. Ha dado charlas en distintos puntos del país convocado por sindicatos docentes, agrupaciones políticas y estudiantiles de varias universidades y profesorados. Intervino como expositor en Congresos Alternativos de Educación. También es productor periodístico y columnista del programa radial "La Deuda Eterna".