23/11/2024
Por Revista Herramienta
Autora: Clara Ramas San Miguel
(Siglo XXI, 2018)
Este libro nació de la tesis doctoral de la joven doctora europea e investigadora de la Universidad Complutense de Madrid, Clara Ramas San Miguel (Madrid, 1986). Dicha tesis analiza la obra madura de Karl Marx, de la que forman parte El capital y Elementos fundamentales para la crítica de la economía política (borrador) 1857-1858 (más conocidos como los Grundrisse).
El prólogo de su libro fue escrito por Michael Heinrich, conocido investigador alemán, representante de la “nueva lectura de Marx”, quien es maestro de Clara Ramas en el estudio de la citada obra, y ha escrito algunas de las contribuciones más importantes para la recepción de las ideas de Marx en la actualidad.
La autora se ha basado en las últimas ediciones críticas en alemán, conocidas como MEGA, a cargo de la Fundación Internacional Marx-Engels y la Academia de las Ciencias de Berlín-Brandeburgo desde hace tres décadas. El equipo internacional que trabaja en MEGA se ocupa de incluir todos los escritos, manuscritos y cartas de Marx y Engels, de acuerdo a los principios de una edición histórico-crítica. Allí se encuentran todos los textos que se han conservado, respetando su forma y lenguaje originales, sean borradores, anotaciones al margen, u otras variantes, correspondencias, etcétera.
Para dicha edición, por ejemplo, se toma en cuenta que los tomos II y III de El capital, que fueron compilados por Engels en base a los manuscritos que Marx había dejado inconclusos al morir, en medio de importantes discusiones con la dirección de la socialdemocracia alemana. Esto obligó al compilador a hacer sobre los mencionados textos una especie de síntesis más política, simplificando algunos de los borradores que dejó su amigo. Así fue que en la versión que podríamos llamar “engelsiana” no se incluyen importantes reelaboraciones de los primeros borradores, que Marx también había dejado inconclusas. Estas reelaboraciones se encuentran ahora incluidas en los tomos II y III publicados en MEGA. De aquí su importancia para entender El capital como una obra en curso y abierta.
En su libro, Clara Ramas, a la luz de las ediciones de MEGA, critica las interpretaciones posteriores de los textos de Marx por parte de las corrientes marxistas predominantes, y de los grandes aparatos burocráticos que se encaramaron sobre la clase obrera, que en su afán de popularizar sus ideas y ofrecer explicaciones simples y terminantes para los problemas más complejos, construyeron una interpretación “economicista” de los textos de Marx, según la cual éste hablaría de una estructura económica que determina al resto de los fenómenos sociales, y que existe una “falsa conciencia” en los seres humanos, que los partidos herederos de la tradición marxista se encargarían de superar. Según esa interpretación, el marxismo sería la ciencia que mostraría “la verdadera realidad objetiva, que es la estructura económica”.
Cabe señalar que estas desviaciones respecto del pensamiento original de Marx por parte de quienes se reivindicaban como sus legítimos herederos fueron fruto de un largo proceso, no exento de contradicciones. Baste recordar lo que dijo Lenin en 1914, en el curso de su estudio de la Lógica de Hegel en medio del estallido de la Primera Guerra Mundial: “Es completamente imposible entender El capital de Marx, y en especial su primer capítulo sin haber estudiado y entendido a fondo toda la Lógica de Hegel. ¡Por consiguiente, hace medio siglo que ninguno de los marxistas entendió a Marx!”.
La autora se dedica cuidadosamente a demostrar en su libro que en realidad el capitalismo genera sus formas de apariencia, que no son simplemente falsedades, y que la realidad misma está mistificada. No se trata de errores en la cabeza de los seres humanos, sino una forma de realidad, de “abstracciones reales”. Por eso, en El capital, Marx utiliza muchas metáforas, y habla de encantamientos, de un mundo puesto al revés…: “El carácter misterioso de la forma mercancía estriba… en que proyecta ante los hombres el carácter social del trabajo de éstos como si fuese un carácter material de los propios productos de su trabajo, un don natural de estos objetos…”
A lo largo de los ocho capítulos de su libro, Clara se va abriendo paso, discutiendo y poniendo al descubierto el pensamiento maduro de Marx, explorando sus argumentos y sus esfuerzos de manera inteligible y atractiva, incitando a los lectores a profundizar las ideas del “hombre que sacó la filosofía de las academias para ponerla en los puños del mundo” (una acertada definición de Luis Franco).
El libro finaliza con un epílogo, “Sobre el lugar el fetichismo”, por Carlos Fernández Liria, también estudioso del pensamiento de Marx y profesor de Clara, aunque con puntos de vista que en algunos casos difieren de los de la autora, quien no obstante lo incluyó en su obra para que los lectores puedan contrastar y juzgar por sí mismos.
La autora pretende que este libro sea un acercamiento a Marx por parte de sus lectores, sin necesidad de que sean “marxistas”, y por fuera de las simplificaciones y tergiversaciones hechas por muchos que se reivindican parte de la tradición marxista, para que aquellos lo vean como un pensador vivo, y puedan vislumbrar los caminos que Marx abre para comprender la sociedad contemporánea y luchar contra ella. Vale la pena, entonces, leerlo.
Francisco Sobrino es integrante del consejo de redacción de Herramienta